El viento en el tratamiento del jardín
Uno de los aspectos que el profesional de la jardinería conoce muy bien es el factor viento.
Con ello nos referimos, en esta temporada, a las rachas cambiantes de viento que pueden azotar la costa del sol, desde el frescor de Levante que nos da días agradables y atemperados al terral que viene del norte (que muchos creen que del Sahara, pero no es así), que puede llegar a afectar al jardín con sus rachas calientes, húmedas y a veces hasta con partículas en suspensión, arena muy fina que puede afectar a las plantas y al riego.
Con el viento tenemos un problema y es que puede afectar a los tratamientos que estemos haciendo para el jardín. Una empresa de jardinería en Marbella desde luego controlará el aspecto atmosférico para adaptarse a él y poderle sacar todo el partido: asegurará ramas y plantas delicadas si es menester para que no sufran, vigilará los árboles más delicados o en etapas críticas de crecimiento para que no se vean tan afectados y también si hay frutales, cuidará de que sufran lo menos posible dentro de lo posible.
Además también se deberá eliminar cualquier aspecto de una planta que pueda afectar a lo que la rodea, como ramas que con el viento puedan tocar estructuras, que se puedan rozar entre árboles por culpa de esas rachas o que se vean débiles y no se hayan mostrado así hasta la primavera, después de las podas de invierno.
Igualmente con el viento no es todo malo. También favorece la polinización de las plantas del jardín y atrae otros pólenes, siempre que sea suave.
Una empresa de jardinería en Marbella contará con el viento en su calendario, observará las variaciones y estará informada de forma puntual de los acontecimientos climatológicos para incluirlo en sus menesteres relacionados con el cuidado de los jardines, el paisajismo de zonas concretas y también el cuidado general, sabiendo así que después de los días más fuertes de viento conviene repasar el jardín, retirar hojas muertas y diversas partículas y restos que haya traído el aire, repasando, además, el estado de árboles, palmeras, setos y plantas, cuidando y vigilando las más delicadas y los árboles más tiernos o en crecimiento para que no se tuerzan o deformen con las rachas, que en muchas ocasiones es uno de esos factores que hacen que crezcan irregularmente.