El árbol ideal para tu jardín puede ser una cuestión no difícil pero sí concienzuda de pensar. Esto se debe a que nos puede gustar mucho un sauce llorón, que puede alcanzar fácilmente los 15 y hasta 20 metros y nuestro jardín quizás no tenga tanto espacio para un árbol de ese tamaño, para el crecimiento de esas raíces y la cantidad de agua que necesita. De ahí que elegir el árbol adecuado sea un ejercicio de buen hacer, ser conscientes del espacio del que disponemos y queremos ocupar, a la vez que pensamos en cómo puede quedar en sus distintas etapas de crecimiento. Por supuesto siempre vamos a recomendar que se acuda a un jardinero especializado o paisajista profesional que nos ayude con estas labores ya que conocen perfectamente bien las especies, pueden juzgar lo que va a quedar mejor en ese espacio del que disponemos y las necesidades que la o las especies pueden tener.
Preguntas que te tienes que hacer para elegir un árbol para el jardín:
¿De qué espacio dispongo?
El espacio determinará en gran parte el abanico de especies que puedo disponer. Además de tener en cuenta de si es un espacio abierto o cerrado ya que determinadas especies de árboles como los eucaliptos y nísperos, por solo poner un ejemplo variado, son conocidos por escarbar con las raíces y poder llegar a los cimientos de una casa por lo que se suele recomendar plantarlos en el extremo del jardín, bien alejados para que en su crecimiento no tengamos problemas posteriores con las estructuras de la casa, muros, etc.
Unos árboles frutales de raíces más menudas como el limonero, manzano o naranjo podrán estar un poco más cerca, desde luego, y aportar sus aromas florales más próximos a la casa; siempre teniendo en cuenta que también nos hará falta ocuparnos de la cosecha de esos árboles y de sus características de necesidad de luz, orientación y tratamientos (de ahí que sigamos reocmendando a un especialista en jardinería)
¿Qué finalidad tiene el árbol?
Sí, los árboles, a la hora de elegirlos, deben tener una finalidad. No nos basta plantar por plantar. Tenemos que tener un objetivo con él para que esté perfectamente integrado y sepamos qué hacer, dónde ubicarlo, y qué necesidades tiene para saber de qué no s tendremos uqe hacer cargo.
Esas finalidades pueden ser:
Ornamental
Podemos querer un tipo de árbol por su estética, perfil, por sus flores o lo que vaya a aportar a la imagen total del jardín, con un afán paisajista y que alimente esa estética total integrándolo bien, como un cerezo, por su época en flor, árboles cuyas hojas varíen con las estaciones como arces, ginkgo, falsos plátanos, o el que convengamos con un paisajista que nos ayude a elegir la mejor especie para el efecto deseado.
Privacidad
Otros árboles más densos nos pueden dar privacidad por lo que estaremos buscando siempre una especie de hoja perenne que no nos falle a la hora de obstaculizar la vista conforme pasan las estaciones, como cipreses o abetos.
Paisajismo
En el paisajismo se contempla el uso de muchos tipos de especies en función del tipo de diseño que se esté realizando, muchas veces combinando varias de esas especies, uso de algunas híbridas y siempre con la perspectiva del diseño, la armonía y el efecto que se esté buscando.
Sombra
En lugares muy soleados podemos querer incluir árboles que den respiro a la batalla con el sol, como aquellos que aportan una sombra frondosa. Una vez más ponderar qué especie plantamos es fundamental porque no será lo mismo en requerimiento de agua y espacio recurrir a un ficus, jacaranda, olmo o pino. Dependerá siempre de qué efecto y tipo de sombra queremos.
¿Quiero que tengan flores?
Que los árboles tengan floración también es importante a la hora de elegirlo puesto que tiene las consecuencias de lidiar posteriormente con pétalos, insectos y consecuencias de esas floraciones. Pero pueden quedar preciosos, y también ser un factor importante en el mantenimiento así como en la cantidad de agua y por supuesto en el aspecto estético.
¿Cuáles son los árboles de la zona? ¿Puedo plantar uno no autóctono sin problemas añadidos?
Los profesionales suelen decir que lo mejor que puedes hacer para saber qué árboles conviene al lugar donde vives es observar la zona que te rodea. Así podrás ver qué especies son endémicas y están más preparadas para el clima del lugar donde se encuentre tu jardín, pero no obstante un profesional podrá decirte qué especies son también compatible sin tener que sacrificar demasiado en agua o espacio.
Árboles que crecen con circunstancias análogas y pueden dar un aspecto exótico a tu jardín o ser una inspiración paisajística distinta.
Estas son algunas consideraciones sobre árboles para tu jardín, pero podemos hablar mucho más si nos lo dejáis comentado.
