Que Andalucía ofrece múltiples climas no es ningún secreto. Y que la Costa del Sol ofrece diversas ventajas en función de la locación concreta, tampoco lo es.
Hoy venimos a hablar de los jardines de azotea, que tan de moda se han puesto en el norte y en Copenhague se ha convertido en ley. Sin embargo en la Cosa del Sol, en lugares tan distintos para la jardinería como Marbella, Estepona o Málaga, podría decirse que los jardines de azotea necesitarían una adaptación muy concreta.
Los jardines de azotea tienen la ventaja de que ofrecen la capacidad de regular la temperatura al suponer una capa intermedia entre el terrado/techo y el interior y una función también de aislante térmico. En estas latitudes, algo muy agradecido sobre todo en el periodo estival.
A la vez, y bien cuidado, sumando el factor de la ubicación los jardines de azotea se pueden usar como función de huerto urbano. Dado el clima de la Costa del Sol esto puede hacerse sin mucho problema siempre que se observe la idoneidad del emplazamiento y la ubicación, como hemos dicho antes. Un huerto urbano tiene esa capacidad de proporcionar cuando menos, un pequeño surtido que bajan la lista de la compra y redunda en el beneficio tanto a nivel atmosférico durante su crecimiento como en la salud al tomar alimentos no procesados y con el consiguiente ahorro en producción de plásticos, envases, etc.
La mejora del aire, y más en ciudades con alta densidad, es siempre un objetivo, y los jardines de azotea contribuyen a ello (como hemos dicho en el caso de Copenhague y ahora que se están poniendo de moda en lugares como Madrid). Y es que junto a la sostenibilidad el factor de los jardines de azote a son un gran paso para la reconversión del aire de las ciudades que en muchas ocasiones muestran esas «boinas» de mal aspecto, marrones y amenazantes y que, poco a poco, deberíamos ir haciendo desaparecer.
En lugares donde la lluvia no es una constante y que en muchas ocasiones las descargas de lluvia son rápidas y furiosas, con picos de muchos litros por metro cuadrado, la absorción y la poca preparación de las estructuras hacen que se acuse mucho esos chaparrones. Los jardines de azotea, ya sean verdes o xerojardines sostenibles, hacen que se pueda absorber hasta un 80% de ese agua pluvial y proteger la techumbre adecuadamente, además del aislamiento del calor que ofrece al suponer varias capas entre el techo y la vivienda.
Estas son algunas de las razones para optar por un jardín de azotea, alejado del habitual jardín a ras de suelo. Pero sin duda, si necesita que le asesoren sobre ello no dude en acudir a un verdadero profesional de la jardinería en Marbella o Málaga como es Greenthia.
